El mundo de la animación no es tan bonito como se pinta desde fuera, y no han sido pocas las voces que hasta ahora se han alzado para denunciar las malas condiciones en las que trabajan los animadores actualmente. Una veterana de la industria, la animadora Sachiko Kamimura (City Hunter, películas de Doraemon) hablaba recientemente en su blog sobre el sueldo que recibe un novato que comienza a trabajar en su campo. Tras haber visto como “muchos jóvenes animadores recién salidos de la universidad se ven abocados a aceptar un trabajo con el que no pueden ni siquiera comer“, decía sentir la necesidad de revelar el que considera uno de los hechos más impactantes de la industria de la animación: Una paga inicial de apenas 120 yenes la hora.

En su post, Kamimura explicaba que los animadores generalmente cobran por frame completado y no por un salario fijo ni por horas, haciendo que lo que cobran dependa directamente de cuánto son capaces de trabajar, Sin embargo, asegura que aunque eso era razonable hace veinte años, con el estilo de animación actual, que requiere más atención a los detalles, no es algo que un novato pueda realizar a la velocidad suficiente como para ganarse un sueldo decente. Aunque ella misma se ha acostumbrado al ritmo a través de sus años de experiencia, asegura que simplemente no es factible pedir tanto a un novato. Estima que incluso sacrificando horas de sueño y olvidándose de tener periodos de vacaciones, lo máximo que un novato puede alcanzar es unos 500 frames al mes. Con sus cálculo, un mes normal con 250 horas de trabajo supone para un trabajo unos 30.000 yenes, mucho menos del sueldo mínimo del país, establecido en 888 yenes la hora.

Aun así, otros miembros de la industria de la animación parecen no estar de acuerdo con la opinión de Kamimura. Noriyuki Fukuda (D.Gray-man, Lupin III vs Detective Conan the Movie), que es otra animadora reconocida, respondía vía su cuenta de Twitter diciendo: “Es mejor no usar como referencia los comentarios de otras personas sobre que los animadores cobran 120 yenes la hora“. Fukuda asegura que, en realidad, aunque la cantidad de trabajo que un animador puede realizar sí que influye directamente en cuánto cobra, esto es solo un añadido a una cantidad fija que reciben de antemano y que puede oscilar entre los 50.000 y 80.ooo yenes. También explica que ese trabajo más detallado del que habla Kamimura en rara ocasión se asigna a los novatos, que suelen ser los responsables de frames más sencillos como aquellos que requieren sincronización labital. También estima que, en frames de dicho tipo, se pueden hacer unos cuatro por hora, y que ninguna compañía aceptaría como trabajar a nadie incapaz de hacer menos de dos por hora.

Otro animador cuya cuenta de Twitter responde al nombre de @SAKUOKI asegura que el precio base que Kamimura comentaba no se aplicó a su grupo cuando él comenzó en la animación, pero que no puede negar que no tenga razón, y que de hecho, incluso ha escuchado hablar de casos peores. Asegura que aunque muchos estudios usan a los novatos para el trabajo duro, es cuestión de buscar entre ellos para encontrar uno en el que paguen bien.

Aunque las cifras de Kamimura puedan ponerse un poco entre dicho, Kamimura asegura que no son pocos los nuevos animadores que se han visto forzados a abandonar la industria debido a lo mal pagado que está su trabajo. Cree que para poder preservar la calidad del anime, y para mantener un buen flujo de nuevos animadores, se debería fijar un sueldo mínimo de 100.000 yenes mensuales.

El post de Kamimura puede leerse en su blog vía Blogger.